martes, 16 de marzo de 2010

Sobre Alteridad. Opinión de Bruno Jordán

 
Bruno Jordán es escritor y periodista.




Alteridad no es que no tenga la connotación de solidaridad, sino de movimiento de curiosidad hacia lo extraño, lo no-propio, como hay quien piensa.  Alteridad, al igual, que Solidaridad, es un concepto-conducta, no es como el de silla. Lo abstracto de lo que tiene en cuanto concepto, adquiere sentido únicamente cuando existe al tiempo la praxis de los actos. Lo adquiere no solo formalmente. También literalmente. 


Pese a que el término ha albergado diferentes -y frecuentemente contradictorios- contenidos a lo largo del desarrollo filosófico, lo uso y lo concibo como incontrovertible (¡válganos Popper!) heterogeneidad del Yo y su Ser en relación al resto de realidades, sean pensadas o generadas por los actos. La admisión de esa heterogeneidad, aprendida con y del Otro, facilita, frente al de competencia, el principio de cooperación, que quizá sea la base imprescindible para la supervivencia de nuestra gregaria especie humana.
Lévinas –a quien la mayoría atribuye su uso actual- separó con precisión las fronteras entre términos cuyo uso era generalmente concomitante y hasta sinónimo: empatía y solidaridad. Intentó establecer que alteridad era otra cosa que, además, las incluía.
Concluyó –yo coincido- en que “lo existente, que da sentido a los entes en el mundo, produce una impersonalidad árida, neutra, que solo podría ser superada en el ser-para-el-otro, como momento ético de respeto a la alteridad. La relación del Yo respecto al Otro, en su dimensión de temporalidad y trascendencia, no es el hecho de un sujeto aislado y único, sino que adquiere la  significación auténtica en la apertura hacia los otros, en una perspectiva diacrónica. Si podemos transmitir la existencia por la palabra, pero no podemos compartirla en el ámbito del saber, ¿qué tipo de comunicación con el ser puede hacernos salir de la soledad? Nunca más un ser para la muerte sino un ser para el Otro. El tiempo no debe ser una experiencia de duración, sino un dinamismo que nos lleva para otro lado diferente de las cosas que poseemos, un tiempo como relación con una alteridad inalcanzable y así producir una alteración del ritmo y sus giros”.
Como humanos, alteridad para sobrevivir, solo alcanzo a decir.

Bruno Jordán



Bruno Jordán es escritor, periodista, amén de otras muchas cosas (de la mayoría de ellas solo pretende ser).

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