viernes, 12 de agosto de 2011

Concentración en la Plaza Belluga de Murcia (frente al edificio del Obispado) por la visita del Papa y los gastos que nos acarrea

Concentración en la Plaza Belluga de Murcia (frente al edificio del Obispado) por la visita del Papa y los gastos que nos acarrea

Lugar: Plaza Belluga de Murcia (frente al edificio del Obispado)
Miércoles, 17 de Agosto de 2011, a las 20:30




Por estas razones:



DE MIS IMPUESTOS, PARA LA VISITA DEL PAPA, CERO



A pocos días de  la visita del  Sr. Ratzinger -Benedicto XVI para los católicos-,  a Madrid, nada habría que objetar a la reunión de un pastor espiritual con sus seguidores, desde el punto de vista del laicismo y de la democracia. La convocatoria “Jornada mundial de la juventud”  pretende congregar a miles de jóvenes católicos en torno a las enseñanzas del papa. Un acto que, cualquiera que sea su dimensión, no deja de tener carácter privado, como privadas son las creencias y sus manifestaciones.

Lo que sí es contrario a un Estado democrático que se declara aconfesional es mezclar los asuntos del estado y asuntos religiosos, los intereses generales con los intereses privados, las instituciones que representan a todos los ciudadanos con eventos que sólo conciernen a una parte, en este caso, a quienes comparten unas determinadas convicciones religiosas.

 Por eso, resulta escandaloso que el Gobierno contribuya con 25 millones de euros -es decir, con dinero de los impuestos de todos- a la visita del papa y a la celebración de un acto confesional, a la vez que concede exenciones fiscales a las grandes empresas que han comprometido otros 25 millones. A ello hay que añadir otros muchos más que están dispuestos a aportar tanto Gobierno central como Ayuntamiento y Comunidad de Madrid sufragando otros gastos con la cesión gratuita de numerosos servicios públicos (personal funcionario, visados, transportes, fuerzas de seguridad, utilización de espacios públicos como polideportivos, colegios e institutos, etc.). Igualmente se han rebajado los precios de transportes públicos para los peregrinos católicos, como el Metro de Madrid, en una cuarta parte. Así un billete que a un ciudadano-a le cuesta 24 euros al peregrino católico le va a costar 4 euros.

Esa desviación de recursos públicos para fines privados tiene especial gravedad en un momento en que tanta generosidad para con la jerarquía católica (que ya recibe por distintas vías en torno a los 10.000 millones de euros anuales) entra en contradicción con las duras restricciones en el gasto público y prestaciones sociales que todos estamos sufriendo bajo pretexto de la crisis económica. Del mismo modo, es inaceptable que en ese acontecimiento de carácter privado se impliquen y participen autoridades y cargos oficiales, que estarían en su derecho de hacerlo a título personal, pero nunca en representación de las funciones públicas que desempeñan en nombre del conjunto de los ciudadanos.

En este caso no vale el subterfugio de que son gastos y honores debidos a un jefe de Estado. El papa Benedicto XVI no viene en representación de los escasos habitantes del Vaticano que, por otra parte, nada tiene que ver ni por su origen ni por su configuración con un verdadero Estado democrático y de derecho. Si viene a reunirse con sus adeptos en función del liderazgo espiritual que ellos en exclusiva le reconocen, en modo alguno procede el trato oficial y de privilegio dispensado por las Administraciones Públicas. Un trato que, evidentemente, no conceden a convocatorias promovidas por ciudadanos de otras creencias o convicciones ideológicas. Tampoco se le permitiría a ningún jefe de Estado la injerencia, incesantemente repetida por el Papa y la jerarquía católica, en asuntos políticos internos como son las propias leyes que un país se da de forma democrática (educación pública, laica, derecho a la propia sexualidad y control de la reproducción, modelos de matrimonio y familia, derecho a una muerte digna, etc.). Pues no se limitan a dar consejos morales a sus fieles, cosa legítima, sino que pretenden convertir sus particulares visiones de la moral y de la sociedad en normas obligatorias para todos.

Además debe considerarse que un Estado democrático no debe costear la difusión de una doctrina o el fortalecimiento de una organización que:

- rechaza la igualdad y mantiene un papel secundario para la mujer.

- es homófoba, va contra el matrimonio entre homosexuales.

- que ataca el derecho al aborto.

- que ataca el uso del preservativo aunque mueran miles de personas por SIDA.

- que mantienen y protege a pedófilos en su seno.

- que mantiene acuerdos y concordatos que privilegian su posición jurídica para difundir sus doctrinas y se aprovecha de las arcas públicas de los Estados para su fín particular.

- que mantienen miles de catequistas dando su religión en las escuelas públicas pagados por un Estado aconfesional como el español.

- que reciben miles de millones de euros al año del Estado, en concreto, 10.000 millones de euros.

Llamamos a todos los ciudadanos (sean laicos, cristianos, musulmanes, protestantes, etc...) para que, con independencia de sus convicciones personales, reivindiquen un marco de convivencia en igualdad de derechos, a organizar actos en defensa de la democracia y laicidad del Estado y dirigirse a las distintas Administraciones Públicas para exigirles que obren en consecuencia y dejen de otorgar privilegios propios de épocas pasadas y herencias antidemocráticas.

*NO A LA VISITA DEL PAPA FINANCIADA CON EL DINERO DE TODOS.

*SEPARACIÓN DEL PODER CIVIL Y DEL RELIGIOSO.

*DEFENSA DE LOS DERECHOS DEMOCRÁTICOS, FRENTE A LA INJERENCIA CONFESIONAL: DEROGACION DEL CONCORDATO IGLESIA-ESTADO.

Pulsa Aquí para descargar, imprimir, fotocopiar y divulgar este manifiesto.



 

Modelo de la solicitud de permiso para el acto que presentaremos ante la Delegación del Gobierno en Murcia





               A LA DELEGACIÓN DEL GOBIERNO EN MURCIA


D/Dñª…………………………………………………………………….…, con NIF nº …………………………………………………….., con domicilio en calle ………………………………………………………..…, de……………………… y D/Dñª…………………………………….….………………………, con NIF nº …………….………………………………...., con domicilio en calle ……………………………………………, de………………………   ante la Delegación de Gobierno comparecen y, como mejor proceda en Derecho, EXPONEN:
                    Que amparándose en el artículo 8 de la Ley Orgánica 9/1983, de 15 de julio, reguladora del Derecho de Reunión se solicita a esa Delegación autorización y comunicación con carácter urgente para proceder al ejercicio del derecho de reunión y concentración pública.

             Que, en cumplimiento de lo dispuesto en el artículo 9 del mencionado texto legal, se hace constar lo siguiente:
          Lugar: Murcia,  Plaza del Cardenal Belluga.
Fecha: 17 agosto de 2011.
Hora y duración prevista: La concentración pública será a las 20,30 horas.
1.- Objeto de la misma. EL  OBJETIVO DE LA CONCENTRACION SERA EL SIGUIENTE :  “PARA LA VISITA DEL PAPA, CON MIS IMPUESTOS, CERO”.
            No es compatible con un Estado aconfesional como España que  el Gobierno contribuya con 25 millones de euros -es decir, con dinero de los impuestos de todos- a la visita del papa y a la celebración de un acto confesional, a la vez que concede exenciones fiscales a las grandes empresas que han comprometido otros 25 millones. A ello hay que añadir otros muchos más que están dispuestos a aportar tanto Gobierno central como Ayuntamiento y Comunidad de Madrid sufragando otros gastos con la cesión gratuita de numerosos servicios públicos (personal funcionario, visados, transportes, fuerzas de seguridad, utilización de espacios públicos como polideportivos, colegios e institutos, etc.). Igualmente se han rebajado los precios de transportes públicos para los peregrinos católicos, como el Metro de Madrid, en una cuarta parte. Así un billete que a un ciudadano-a le cuesta 24 euros al peregrino católico le va a costar 4 euros.
Lo que sí es contrario a un Estado democrático que se declara aconfesional es mezclar los asuntos del estado y asuntos religiosos, los intereses generales con los intereses privados, las instituciones que representan a todos los ciudadanos con eventos que sólo conciernen a una parte, en este caso, a quienes comparten unas determinadas convicciones religiosas.
 Esa desviación de recursos públicos para fines privados tiene especial gravedad en un momento en que tanta generosidad para con la jerarquía católica (que ya recibe por distintas vías en torno a los 10.000 millones de euros anuales) entra en contradicción con las duras restricciones en el gasto público y prestaciones sociales que todos estamos sufriendo bajo pretexto de la crisis económica. Del mismo modo, es inaceptable que en ese acontecimiento de carácter privado se impliquen y participen autoridades y cargos oficiales, que estarían en su derecho de hacerlo a título personal, pero nunca en representación de las funciones públicas que desempeñan en nombre del conjunto de los ciudadanos.
En este caso no vale el subterfugio de que son gastos y honores debidos a un jefe de Estado. El papa Benedicto XVI no viene en representación de los escasos habitantes del Vaticano que, por otra parte, nada tiene que ver ni por su origen ni por su configuración con un verdadero Estado democrático y de derecho. Si viene a reunirse con sus adeptos en función del liderazgo espiritual que ellos en exclusiva le reconocen, en modo alguno procede el trato oficial y de privilegio dispensado por las Administraciones Públicas. Un trato que, evidentemente, no conceden a convocatorias promovidas por ciudadanos de otras creencias o convicciones ideológicas. Tampoco se le permitiría a ningún jefe de Estado la injerencia, incesantemente repetida por el Papa y la jerarquía católica, en asuntos políticos internos como son las propias leyes que un país se da de forma democrática (educación pública, laica, derecho a la propia sexualidad y control de la reproducción, modelos de matrimonio y familia, derecho a una muerte digna, etc.). Pues no se limitan a dar consejos morales a sus fieles, cosa legítima, sino que pretenden convertir sus particulares visiones de la moral y de la sociedad en normas obligatorias para todos.
Además debe considerarse que un Estado democrático no debe costear la difusión de una doctrina o el fortalecimiento de una organización que:
- rechaza la igualdad y mantiene un papel secundario para la mujer.
- es homófoba, va contra el matrimonio entre homosexuales.
- que ataca el derecho al aborto.
- que ataca el uso del preservativo aunque mueran miles de personas por SIDA.
- que mantienen y protege a pedófilos en su seno.
- que mantiene acuerdos y concordatos que privilegian su posición jurídica para difundir sus doctrinas y se aprovecha de las arcas públicas de los Estados para su fin particular.

- que mantienen miles de catequistas dando su religión en las escuelas públicas pagados por un Estado aconfesional como el español.
- que reciben miles de millones de euros al año del Estado, en concreto, 10.000 millones de euros.
Llamamos a todos los ciudadanos (sean laicos, cristianos, musulmanes, protestantes, etc.)  que, con independencia de sus convicciones personales, reivindican un marco de convivencia en igualdad de derechos, a organizar actos en defensa de la democracia y laicidad del Estado y dirigirse a las distintas Administraciones Públicas para exigirles que obren en consecuencia y dejen de otorgar privilegios propios de épocas pasadas y herencias antidemocráticas.
*NO A LA VISITA DEL PAPA FINANCIADA CON EL DINERO DE TODOS.
*SEPARACIÓN DEL PODER CIVIL Y DEL RELIGIOSO.
*DEFENSA DE LOS DERECHOS DEMOCRÁTICOS, FRENTE A LA INJERENCIA CONFESIONAL: DEROGACION DEL CONCORDATO IGLESIA-ESTADO.
2.-Medidas de seguridad previstas por los organizadores o que se soliciten de la autoridad gubernativa. La naturaleza pacifista de los asistentes es una característica de la reunión. La organización se encargará de preparar un grupo suficiente de voluntarios y voluntarias para que SE CELEBRE DE FORMA PACÍFICA.
Se reitera que los lemas son absolutamente pacíficos: EL LEMA Y OBJETIVO DE LA CONCENTRACIÓN SERÁ EL SIGUIENTE: Objeto de la misma. EL ÚNICO  OBJETIVO DE LA CONCENTRACION SERA EL SIGUIENTE :  “PARA LA VISITA DEL PAPA, CON MIS IMPUESTOS CERO”.
   3.Motivos de la urgencia. Se expresan a continuación:
                           Al objeto de convalidar esta concentración y reunión espontánea -absolutamente legítima- se necesita sea expedida autorización por la autoridad gubernativa para el plazo de preaviso de 24 horas y no de 10 días debido a que en la última semana y los convocantes consideran  urgente y absolutamente necesario debatir y opinar sobre el objeto de esta convocatoria, y que los ciudadanos expresen en ejercicio de su libertad de manifestación y expresión, art. 20 y 21 de la Constitución española, sus pensamientos y opiniones; sería completamente estéril e inútil una autorización en fecha posterior a las mismas, ya que es el deseo de los convocantes y de  un grupo de personas que les han manifestado esta necesidad de realizar el ejercicio legítimo de sus opiniones y manifestaciones antes de la visita del Papa Benedicto XVI a España, esterilidad que truncaría el ejercicio de un derecho fundamental de los ciudadanos.
                     Por lo demás, con anterioridad a esta petición no se ha podido solicitar la autorización, toda vez que, como se ha dicho, los ciudadanos y ciudadanas han decidido en esta última semana iniciar la creación de una plataforma laica contra la subvención con impuestos de todos los españoles de la visita de un líder de una confesión religiosa. Pretendemos, por tanto, convalidar un pacífico y espontáneo ejercicio del derecho reunión por parte de un  grupo de ciudadanos con la suficiente antelación como para que su aprobación tardía no trunque el motivo del que trae causa.
                 Invocamos expresamente la doctrina del Tribunal Constitucional, que en sentencias como STC 170/2008, 37/2009, 38/2009 otorgó el amparo a diversos colectivos que pretendían manifestarse en periodo electoral. En el mismo sentido, invocamos la doctrina del Tribunal Europeo de Derechos Humanos, que considera que el ejercicio del derecho de reunión no puede ser condicionado salvo por razones serias de seguridad y orden público.
                 En el presente caso, de no otorgarse la solicitud que se interesa, se estaría negando el ejercicio del derecho de reunión a personas que se verían así expulsadas de los cauces legales que nuestro régimen jurídico pone a disposición de los ciudadanos, por lo que podrían verse abocados a ejercer sus derechos mediante otras vías. El mantenimiento del orden público exige que se dé un cauce legal a este legítimo ejercicio del derecho de reunión, so pena de grave quiebra de nuestro sistema jurídico y el orden público.
                   Que, además, se señala expresamente que, tal y como se reconoce en la jurisprudencia sobre el ejercicio del derecho de reunión, los participantes en la misma utilizarán mesas destinadas a escribir y mostrar documentación, paneles informativos y equipos removibles, etc.
-         Tras la concentración en la citada Plaza del Cardenal Belluga, los asistentes van a realizar una Asamblea para decidir si se dirigen en manifestación desde dicha Plaza hasta la Delegación de Hacienda en Murcia, Avenida Gran Vía, para trasladar también esta protesta a la Agencia Tributaria, y en caso de aprobarse, se realizaría por Trapería, Plaza Santo Domingo, Plaza Romea y Gran Vía.

Por lo anteriormente expuesto,
SOLICITAN: Que teniendo por presentado este escrito, lo admita a trámite y en su virtud acuerde autorizar el ejercicio del derecho de reunión.
                      Es de Justicia que se solicita en Murcia a trece de agosto de dos mil once.



Firma solicitante 1                         Firma solicitante 2

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